Nosotros, quienes constituimos “La Capitana”, frente a los eventos de dominio público, entendemos nuestro deber expresar lo siguiente:

  • Alertamos que la pandemia de COVID 19 está a la fecha actual, en su fase de máxima intensidad, tanto en el mundo como en nuestro país, tal como lo señalan los 30.000 casos diarios confirmados de las últimas jornadas. Para mayor gravedad, está comenzando a predominar en la circulación comunitaria argentina la temible cepa “Manaos”, originaria de Brasil, país en estado de estrago sanitario y catástrofe humanitaria.
  • Denunciamos que el epicentro de esta problemática se da en el territorio de la CABA, jurisdicción que presenta los peores índices actuales en cuanto a contagios, internaciones y mortalidad. La ciudad se ha tornado en una verdadera bomba biológica, con el terrible potencial de diseminar su enorme carga de enfermedad a la población residente en los distritos más cercanos del conurbano bonaerense. Como bien se sabe, el virus no respeta límites políticos.
  • Recordamos que el factor de riesgo de contagios más importante en todo el mundo, ya demostrado de forma incontrovertible por la evidencia médica internacional disponible, es la aerosolización de micropartículas virales que pueden quedar en suspensión durante largos períodos de tiempo, incluso horas. El riesgo se acentúa en función de la intensidad, proximidad y duración de los contactos interpersonales, máxime en recintos cerrados. Es por esta razón que en todos los países con alta incidencia de la enfermedad se han tomado medidas restrictivas contundentes, incluyendo casi sin excepciones, la suspensión de las clases presenciales en todos los niveles educativos..
  • Repudiamos la inicua intención de las autoridades de la CABA de desconocer los alcances de la reciente decisión del Presidente de la Nación, decretando una serie de medidas en el Área Metropolitana Buenos Aires, incluyendo la suspensión de las clases presenciales. Esta estrafalaria pretensión carece del menor fundamento médico científico y es contraria a toda la evidencia disponible. Aunada al insólito e impertinente fallo judicial del día de ayer, además de una criminal exposición al riesgo de contagio a la población propia y a la del vecino conurbano bonaerense, importa en los hechos, una seria e inaceptable vulneración del marco legal y constitucional argentino.
  • Destacamos que en el ordenamiento jurídico internacional, en situaciones fuera de la normalidad, excepcionales y extremas tales como la pandemia, el derecho humano relativo a la vida y la salud prevalece sobre el resto de los derechos humanos, incluyendo el de educación, mucho más cuando existen alternativas como las clases virtuales para su ejercicio.
  • Manifestamos, por último, nuestro incondicional apoyo a las medidas que el gobierno nacional ha adoptado para proteger la vida y la salud del pueblo argentino. Exhortamos a quienes de buena fe hayan incurrido por desconocimiento de los riesgos en una equívoca valoración de las prioridades, a rectificar su error y confluir con la inmensa mayoría del pueblo argentino, que aspira como siempre a construir su futuro y el de sus hijos con salud y en paz.

 

                                                                  Capital Federal, 19 de abril de 2021