Desde un principio, el actual presidente de los EEUU, en franco contraste con su antecesor, adopta en el tratamiento de las cuestiones de estado una actitud con las características más duras de los últimos gobiernos republicanos. Además, y esta es una novedad, opta por maltratar a sus pares en ejercicio del poder en naciones, hasta ahora, tradicionales aliadas.
En un comienzo fueron posturas y gestos poco habituales, para ser benignos; se pensó que eran simples extravagancias, pero con el correr del tiempo, los desplantes no inocentes del presidente Trump, sus agresiones y amenazas, comenzaron a operar con severas consecuencias que afectaron el hasta entonces previsible statu quo internacional. En su soberbia no imaginó que sus socios se atreverían a cuestionarlo y que, lejos de resignarse, estos estrecharían su firmeza defensiva y responderían con un acelerado enriquecimiento de la vinculación entre ellos: La Unión Europea junto a las naciones que EEUU considera lisa y llanamente sus peores enemigos: Irán, Rusia y China.
Este comportamiento, en especial en lo referido a los países de la UE y Canadá, dio como resultado la fractura del atlantismo, que suponía una visión común de Occidente hacia valores compartidos, nacida de la condición de aliados en la segunda guerra mundial, y que daría lugar a la creación de la Organización del Tratado del Atlántico Norte y demás instituciones surgidas a partir de la finalización del conflicto; en su postrimería, del 1º al 22 de julio de 1944, en la Conferencia realizada en Bretton Woods, se establecieron las reglas que normarían las relaciones comerciales y financieras entre los países más industrializados del mundo; se decidió la creación del Banco Mundial y del Fondo Monetario Internacional. Ambas organizaciones empezaron a funcionar en 1946, usando el dólar estadounidense como moneda de referencia internacional.
En los meses previos a Bretton Woods se habían debatido dos propuestas distintas; una, apoyada por Estados Unidos, resultó vencedora; fue elaborada por Harry Dexter White. La británica correspondió al economista John Maynard Keynes y consistía en la creación de un órgano internacional de compensación, la International Clearing Union (ICU), que emitiría una moneda internacional (Bancor) vinculada a las divisas fuertes y canjeable en moneda local por medio de un cambio fijo. Esta decisión sería de algún modo el acta de desplazamiento del rol que había desempeñado Gran Bretaña durante años y hasta entonces; finalizada la guerra, se reconocerá a los EEUU como figura central de la economía y las finanzas de Occidente y líder mundial en lo político, económico y militar.
Se inicia entonces el período de la llamada “guerra fría” que se extiende hasta la caída del Muro de Berlin (9 de noviembre de 1989) y la disolución de la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (8 de diciembre de 1991) con el Tratado de Belavezha, que marcó el final de ese período, con la constitución de Estados que reemplazarían a las hasta entonces Repúblicas Soviéticas.
Entonces sobreviene una etapa de unilateralismo norteamericano, que fue severamente deteriorado durante la gestión de George W. Bush y se acelera a partir del atentado a las Torres Gemelas (1 de septiembre de 2001) y la invasión de Irak (20 de marzo de 2003).
Para entonces el mundo alentaba tímidamente el ingreso a un ciclo de multilateralismo controlado, y así fue aunque de manera imperfecta, pero con el advenimiento de Trump las cosas comienzan a cambiar ya que el presidente deseaba una distinta configuración del poder mundial. En su visión, en una primera instancia, sería necesario compartir con Rusia, ciertas posturas comunes, dividiendo claramente las áreas de influencia.
Con esa convicción expresada sin vueltas, no fue necesario esperar mucho tiempo para observar los resultados de la persistente tarea de desbaratar los importantes consensos internacionales establecidos, en buena parte logrados durante la gestión de su predecesor Barak Obama, a quien Trump le negaba toda condición de liderazgo para si reconocerlo en V. Putin.
Veamos las principales acciones unilaterales del presidente.
**En enero de 2017, se retira EEUU del Acuerdo Transpacífico de Cooperación Económica (TPP – Trans Pacific Partnership), firmado en Auckland, Australia, el 4 de febrero de 2016. Este tratado de libre comercio reunió a EEUU junto a 11 países de la Cuenca del Pacífico.
**En agosto de 2017, la declaración de EEUU, que anunciaba el retiro del Acuerdo de París sobre cambio climático y cuidado del medio ambiente, firmado el 12 de diciembre de 2015, por 195 países y ratificado en Nueva York, en la sede de la ONU, el 22 de abril de 2016.
**En mayo de 2018, alegando informes de la inteligencia israelí sobre incumplimientos de Irán, EEUU se retira del acuerdo limitativo de la actividad nuclear de Irán Plan Conjunto de Acción Comprensiva (JCPOA, por sus siglas en inglés), firmado el 14 de julio de 2015 por Irán con EEUU, Rusia, China, Gran Bretaña y Francia (los cinco son miembros del Consejo de Seguridad) más Alemania (grupo 5+1).
**En octubre de 2017,Estados Unidos había anunciado su retiro de la Organización de Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco).
**El 23 de marzo de 2018, el gobierno del presidente Donald Trump, impuso un aumento de aranceles de 25 por ciento en las importaciones de acero y de 10 por ciento en las de aluminio, pero ordenó la suspensión de la imposición de los mismos a la UE, Argentina, Australia, Brasil, Canadá, Corea del Sur y México. El 31 de mayo del mismo año anunció que a partir de la 0 hora del día siguiente se dejaba sin efecto esta exención de aranceles en relación a Canadá, México y la UE, desconociendo lo pactado en el Tratado de Libre Comercio de América del Norte, (TLCAN, o NAFTA, por sus siglas en inglés) vigente desde 1994. A partir de aquí el Tratado fue modificado y transformado, en octubre de 2018, en el nuevo Acuerdo Estados Unidos-México-Canadá (USMCA, por sus siglas en inglés/ T-MEC, en español) sujeto a ratificación. En el caso de EEUU, sorpresivamente, luego de enviar al Congreso la documentación pertinente, Trump dispuso aplicar a las importaciones provenientes de México una tarifa progresiva del 5 % a partir del 10/06/19 con escala ascendente hasta el 25 % el 01/10/19. De esta forma, presiona severamente para obtener el rédito político del sector ultra que apoya su política vinculada a la erección del muro fronterizo.
** El 19 de junio de 2018, la embajadora de Estados Unidos ante las Naciones Unidas, Niki Haley, anunció que Estados Unidos se retiraba oficialmente del Consejo de Derechos Humanos de la ONU,… “por el prejuicio crónico del Consejo contra Israel”.
**El 1º de febrero de 2019, EEUU anunció que se retiraba del Tratado de Fuerzas Nucleares de Alcance Intermedio (INF, por sus siglas en inglés), celebrado entre los Estados Unidos y la Unión Soviética en Washington el 8 de diciembre de 1987
Continúan produciéndose hechos ratificatorios de la premeditada y beligerante actitud del presidente de los EEUU en el sentido de establecer un nuevo orden basado en su “America First”, lo que provoca respuestas a través del mundo que señalan que, como de costumbre, solo logra Trump el efecto contrario al buscado.
Trump el 17 de abril de 2019, reconoció a Jerusalem como capital de Israel y también en ese mes abogó por la incorporación a Israel de los Altos del Golán, territorio de Siria ocupado de facto por Israel en 1967. Asimismo, celebró la ocupación de territorio palestino en Cisjordania realizada través de los asentamientos ilegales.
Dos días más tarde, el 16 de julio de 2018, en la 20ª Cumbre Unión Europa – China, ambas partes ratificaron la “Estrategia Económica Global”, que consideró las medidas necesarias para evitar las consecuencias de la guerra económica desatada por Trump. Entre otros documentos se firmó un Memorando de Entendimiento entre el Fondo Europeo de Inversiones (FEI) parte del Grupo del Banco Europeo de Inversiones, y el Foro de la Ruta de la Seda (SRF), que confirmó la primera coinversión en el marco del recientemente creado “Fondo de Coinversión China-UE”
Con Corea del Norte el acuerdo que se firmó en junio de 2018, en Singapur, sede de la primera reunión entre Trump y Kim Jong-un, establece que Corea se desnuclearizará, pero no se sabe cuando ni como; no hay términos ni condiciones, ni plazos; por el contrario, Trump declaró a los periodistas -increíble pero cierto- que el desmantelamiento nuclear ”llevará mucho tiempo…” Los coreanos, previamente, lo condicionan ante el incumplimiento de EEUU .
Documento completo: Reconversión de la política internacional norteamericana a partir del 20 de enero de 2017